Cuando adquieres una cámara réflex por primera vez, por lo regular vienen en paquetes en lo que incluyen uno o dos lentes, los cuales son el 18-55mm y el 55-200mm o 55-300mm. Por lo regular el que viene incluido es el 18-55mm, y es de este objetivo del que hablaremos.
¿Por qué es bueno el objetivo 18-55mm?
Este objetivo cubre las necesidades básicas para principiantes en cuanto a ciertos tipos de fotografía, que va desde un gran angular desde 18mm (para paisajes y arquitectura) hasta 24mm (para fotografía callejera o "street photography"), lo puedes utilizar como un lente para toda ocasión en 35mm, y lo puedes utilizar como lente para retratos en 55mm. Además este objetivo también puede funcionar como un pequeño macro, ya que enfoca muy bien de cerca, aunque no es especial para esto.
Lo único que no te cubre es el efecto para tomar fotos de lejos como los telefoto, para lo cual, si es que vas a utilizar esas distancias focales entonces lo recomendable es que adquieras el objetivo complemento que sería el 55-200mm o 55-300mm.
Regresando a nuestro tema, podemos decir que el objetivo 18-55mm tiene una calidad bastante aceptable, no pesa, y lo puedes utilizar para salir a caminar tranquilamente al lugar que desees fotografiar.
Este objetivo dependiendo del modelo, también incluye la función de enfoque automático, el cual funciona muy bien, o si lo prefieres también puedes enfocar de manera manual, ya que cuenta con ambas opciones.
Algunos de estos objetivos cuentan con VR, que es el estabilizador de imagen, el cual funciona para que si te moviste un poco al momento de tomar la foto, este mecanismo lo compensa para darle mayor nitidez y no se vea movida.
Para principiantes este objetivo es perfecto, y aunque babeamos en los aparadores al momento de ver otros más grandes o con capacidades superiores, lo recomendable es primero dominar este, y ya después cuando sepas que es lo que necesitas o prefieres entonces ya inviertas en otro diferente.
Lamento decirte que si crees que te volverás mejor fotógrafo por gastar mucho más, eso no va a pasar. La fotografía requiere que desarrolles ciertas habilidades, el famoso "ojo fotográfico" que es lo que hará que tomes mejores fotos, y esto sólo pasa con la práctica.
Usa tu objetivo, explóralo al máximo, experimenta en varias situaciones, pero sobre todo diviértete.
